febrero 06, 2011

LOS 8 PECADOS CAPITALES QUE HACEN DE LA MEDICINA MEXICANA, UN VERDADERO INFIERNO.

Por @almagoch


Médicos de la envergadura del Dr. Ignacio Chávez , Salvador Zubirán, Federico Gómez, Mario González Ulloa, Manuel Velasco Suárez y Rubén Argüero Sánchez, por mencionar solo algunos… y tantos otros verdaderos gigantes de la clínica, son antecedentes históricos que nos demuestran la enormidad de la que es capaz la Medicina mexicana.


La forma que tienen los Médicos mexicanos de abordar y acercarse al paciente, secundaria quizás, a la falta de recursos que les obliga a ser verdaderos artistas en su práctica clínica, es única. La semiología mexicana, portadora del magisterio de las más grandes escuelas de la clínica clásica (Francia y España), útil hasta nuestros días, es reconocida en todo el mundo.


Los mexicanos somos emotivos, apasionados y sentimentales como casi ningún otro habitante del planeta. Eso nos facilita el poder llegar a ser verdaderamente empáticos, y el establecer un profundo rapport con el paciente durante el interrogatorio clínico. Nuestro camino para humanizar la Medicina, por nuestro bagaje cultural, esta acortado.


En resumen, parece que tenemos todo lo necesario para poder ser uno de lugares con la mejor Medicina del mundo, y sin embargo, nos quedamos tristemente, como en muchas otras cosas, solo en lo que puede ser.


Es por esto que me decidí a escribir este artículo, en el expresare los que a mi parecer, son los pecados más graves de la Medicina mexicana, aquellos que la tienen en un verdadero infierno y aquellos que la mantienen en potencia y no le permiten se acto.

  • 1. ESCUELAS Y FACULTADES DE MEDICINA: Existen en tal cantidad, que pueden compararse con las diez plagas egipcias. Nadie sabe a ciencia cierta cuantas existen en nuestro país. El último dato ofrecido por la Asociación Mexicana de facultades y escuelas de Medicina, habla de la existencia de 80 lugares donde podía estudiarse la carrera para el 2001. Nadie sabe cuantas personas estudian para ser Médicos en nuestro país. Se calcula que son alrededor de 70,000 los matriculados en las distintas escuelas y facultades. Las matriculas de las carreras de Medicina manejan números risorios: mientras algunas escuelas egresan 4,000 estudiantes cada año (UNAM, UDG, Universidad veracruzana), otras egresan entre 8 y 10 alumnos (Tominaga Nakamoto). Si nadie sabe donde están, ni cuantos son, mucho menos que tan actualizados o bien formados están aquellos que fungirán como piezas fundamentales en un tema prioritario para el país, como lo es la Salud. El pecado es evidente: No existe un organismo que regule la calidad y la decencia de los programas, los docentes y las herramientas con la que se educa y se forma a los Médicos mexicanos.
  • 2. VOCACIÓN MALINTERPRETADA: En México, cualquiera que se lo proponga, puede ser Médico. No importa que cuente o no con el nivel cultural, la educación, los recursos, las actitudes y aptitudes para serlo. El proceso de selección es de los más fáciles del mundo. Mientras que en EE.UU. los egresados del M.T.I. pelean las plazas, en México lo estudiantes de las peores preparatorias, que eso si, tienen 9.98 puntos de promedio, tienen pase directo a la carrera. Los pases directos, la enorme oferta de posibilidades, el pagar la inscripción … son suficientes para entrar a un mundo antes exclusivo de los aristócratas (entendidos como individuos educados y adinerados), sabios y verdaderos científicos. Para ser Médico, no solo hace falta querer, es necesario que en quien sea o pretenda ser Médico, exista una serie de conocimientos y habilidades que en su conjunto le permitan ser capaz de curar. Nadie puede percibir la complejidad y la trascendencia que implica ser Médico, sin antes haber recibido una buena formación científica, filosófica, antropológica, sociológica y literaria. Si nuestros estudiantes encontraron su interés en la Medicina viendo series de televisión, estamos perdidos. La socialización de la educación médica, que permite a cualquiera estudiar la carrera, muchas veces sacrificando la calidad, transformó profundamente a la Universidad y a sus escuelas de Medicina. Pasaron de ser templos del saber científico, curioso, experimentador, elegante y magistral, a ser fabricas de instrumentos o servidores públicos que se preocupan poco por curar y se ocupan mas bien de trabajar por satisfacer los intereses propios y los del estado. El pecado aquí es también evidente: No puede escogerse a un futuro Médico solo por una evaluación de los conocimientos generales. Al contrario, los procesos de selección para los futuros estudiantes de Medicina deben ser los más duros de toda la Universidad. Debe analizarse y explorarse en la prueba diagnostica escrita y en la seriedad de una buena entrevista, la capacidad intelectual de quien pretende ser Médico.
  • 3. DESCONEXIÓN ENTRE UNIVERSIDAD Y HOSPITALES/FALTA DE INVESTIGACIÓN: Este es, sin duda, un sacrilegio de la Medicina en México. La Medicina hoy en día demanda una practica que integre en el ejercicio de la profesión, los principios básicos, clínicos, epidemiológicos y tecnológicos. Lo anterior, nunca será posible si el hospital solo busca atender pacientes, cumplir metas productivas y exigencias internacionales. En EE.UU., los hospitales y sus adscritos está respaldados por la investigación básica y clínica realizada en sus Universidades, que en la mayoría de las ocasiones estan frente al hospital. Así, el discípulo observa a sus maestros no solo con el apuntador y en salón de clases, sino junto al microscopio o en la cabecera de la cama del paciente. Así también, el maestro seguirá explotando esa necesidad de saber, que despierta cada nuevo paciente y las patologías que padece. Seguirá leyendo, actualizándose, publicando!!!!! y sabrá dicernir con toda claridad que herramientas debe proveer a sus alumnos para hacerlos exitosos en su practica diaria. El que la Universidad y el hospital sean una misma cosa, favorece la formación de identidad en los Médicos, que no tendrán como en México, que pasar por largos procesos de adaptación por estar en ambientes que no acostumbraron durante su formación. El pecado es más que claro: Los pacientes en México ven a los hospitales como la entrada al infierno, donde no saben que pueda pasar y ni que clase de Médico le pueda atender. Afortunadamente existen ya algunos modelos replicables que demuestran la excelencia de las verdaderas mancuerna hospital-universidad u hospital-universtario como lo es el Hospital San José del Técnológico de Monterrey. Verdaderas, porque la Universidad da forma al hospital y el hospital a la Universidad, al tiempo que crean una valiosa identidad. Esperemos que en corto plazo, lo demuestre también el hospital de la Universidad Panamericana.
  • Otra arista que es cosecuencia directa de esta falta de vinculación, es la carencia de investigadores y por lo tanto, de investigación. ¿Cómo concebir la existencia de investigadores de calidad con tal falta de recursos, sin el soporte de una institución universitaria y sin futuros pacientes beneficiados que incentiven la generación de conocimiento?
  • México destina solo el 0.4% del P.I.B. a la investigación y desarrollo de nuevas tecnologías, mientras que Finlandia y Suecia destinan el 27% . México es, de todos los países de la OCDE, el que menos invierte en investigación. Este pecado es imperdonable. Los recursos públicos se utilizan para seguir pagando los cuellos de botella de las instituciones y las nominas infinitas de los servicios publicos de salud. México no tiene infraestructura suficiente para promover la generación de nuevos conocimientos y nuevas tecnologías. Los Médicos no son formados como investigadores, cosa que es imposible de concebir, en quien pretenda definirse como científico.Mientras la realidad continúe así, seguiremos estancados.
  • 4. NO PUBLICAR CASOS. Este sin duda, es un gran pecado de los Médicos. Los casos que pueden verse todos los dias en consutla en casi cualquier hospital en nuestro país, son realmente interesantes. El enriquecimiento que ofrecen a nivel profesional los pacientes con patologías que se ubican fuera de lo común, es incalculable. Estos pacientes son "comunes" en México, sobretodo por el desarrollo no intervenido de la historia natural de la enfermedad. A pesar de que los Médicos son conscientes de lo importante que resulta en la práctica clínica el compartir experiencias, deciden guardarse el aprendizaje para ellos mismos. Es por decidia, por "falta de tiempo" y por desinterés, que los Médicos mexicanos no estamos acostumbrados a escribir sobre nuestra práctica. El pecado es evidente: El egoísmo al momento de decidir no escribir o ni si quiera plantearse la posibilidad de hacerlo, tiene sus profundas consecuencias: los journals mexicanos, son poco respetados, de contenido escaso y siempre con los mismos autores. Pero aún más grave, es la ausencia de estadísticas, que impiden el desarrollo de la medicina basada en la evidencia, obtenida del los mismos mexicanos, para aplicarla en los mexicanos.
  • 5. CENTRALIZACIÓN DE LA MEDICINA: Resulta increíble pensar que todos los institutos nacionales de salud estén en el D.F. En México los mejores hospitales públicos y privados, las mejores escuelas de Medicina, las academias nacionales y los colegios médicos más importantes, están en un mismo sitio. Esta realidad, dificulta no solo el acceso equitativo de los pacientes a los servicios de salud y la saturación de los mismos, sino también el acceso de los Médicos en formación a programas estructurados que les permitan especializarse adecuadamente. ¿Cómo es posible que la gran mayoría de los especialistas médicos, sean egresados de la UNAM y de la UDG? La consecuencia, es evidente: Al terminar la especialidad, todos los Médicos y todas las enfermeras, se reparten solo en 3 estados del país.
  • Desde luego, esta centralización desaparecerá paulatinamente, con el crecimiento cada vez mayor de otras ciudades y con el registros de los problemas prioritarios en los distintos estados del país. Mientras tanto, el pecado aquí, es la mala distribución de los recursos económicos, materiales y humanos en salud, que provoca el hecho de que los mejores hospitales estén todos en una misma area geográfica, miestras que las zonas más pobres, ni siquiera cuentan con el número suficiente de camas censables a manera de Hospitales Generales o de alta especialidad. El acuerdo para la decentralización de los servicios de salud, esta firmado desde 1996, y los avances hasta hoy, son casi imperceptibles.
  • 6. DIVISIÓN DEL SISTEMA DE SALUD: Otro de los pecados sacrilegos de la medicina en México, lo representa la multidivisión del sistema de salud. Esta divido y subdividido en mil pedazos: El IMSS, el ISSSTE, la SSA, PEMEX y la SEDENA, así como en todos los programas sociales de salud. Concebidos y creados en otros tiempos totalmente distintos, hoy parecen mas bien una división clasista de los servicios de salud. ¿Por qué los trabajadores del estado merecerían una Medicina distanta a la de cualquier otro trabajador? Yo no encuentro ninguna respuesta. Esta división, como cualquiera en cualquier otro tema, solo provoca ineficiencia, desperdicio de recursos, administraciones complicadas, cuellos de botella y oportunidades de corrupción, que hasta ahora han sido muy bien aprovechadas (entre letras léase K-A-R-A-M). El pecado aquí, es que el poder legislativo de nuestro país, destina mas recusos económicos para la salud, solo para aumentar el número de derechohabientes, pero sin invertir en tecnología, sin mejorar la capacitación de los recursos humanos y sin aumentar inteligentemente el número de los mismos. Pero resulta aún mas grave, que lo hacen sin plantear una reforma urgente, que consolide al sistema de salud en uno solo. Ni un solo candidato, senador, diputado, presidente y cuanto político podamos imaginar, menciona la reforma de salud. Todos están felcices con el seguro popular, que tapa un hoyo para descubrir veinte.
  • 7. FALTA DE CULTURA EN SALUD/SISTEMA DE SALUD PATERNALISTA.- El otro gran pecado de la Medicina en este país son los mismísimos pacientes. En un sistema de salud precario en recursos materiales y humanos, no puede permitirse que la población este tan poco educada en cuanto al cuidado de la salud se refiere. Eso sin agregar que somos el país con mas obesos en el mundo, lo que no habla nada bien de nuestros hábitos o mejor dicho, vicios higiénico-diéteticos. La estrategia fundamental de los servicios de salud debería ser la prevención primaria. Los hospitales, tristemente, solo alcanzan a cubrir el segundo y tercer nivel de prevención, pero al primer nivel nadie lo cubre. La población en general, ricos y pobres, analfabetas y universitarios, no saben distinguir cual es la linea divisoria entre estar sano y estar enfermo, no saben las parte del cuerpo, no saben que es una urgencia, no saben cuando acudir al Médico, no pregunta nada, se les olvida todo, no guardan las recetas, no se acuerdan de que medicamentos toman, no se apegan al tratamiento, ni siquiera saben como expresar el padecimiento al Médico: Es que me deshuance!! … ¿Qué es eso?. Lo normal se les hace anormal y lo anormal, como la ausencia del sangrado menstrual, se les hace normal. No confían en sus Médicos, prefieren confiar en la comadre, en el vecino, en la partera, en el chaman, en el sobador o en el peor de los casos, en la inmensa, desesperante, casi asfixiante lluvia de comerciales de medicamentos inservibles, no regulados y que al final, son solo productos basura. Y si con eso no es suficiente, esta la proliferación pestilete de las farmacias con Doctor y consulta por miseros $25 pesos, engendros malditos de una cadena de corrupción llamada Simifarmacias.
  • Una parte de culpa la tienen los padres y los maestros, quienes no enseñan reglas básicas de higiene y buenos hábitos a sus pupilos. La materia de salud, debe ser parte del temario de la educación en nivel básico. Gran parte de la culpa la tenemos los Médicos, quienes devorados por el sistema, no escuchamos ni hablamos con nuestros pacientes. Pero al final, la culpa la tiene el paternalismo del sistema de salud en Mexico. Existen 30 millones!!!! de afiliados al seguro popular. Estos pacientes no se preocupan por nada, no paga impuestos y a pesar de eso, la televisión presume que duermen tanquilos por que tienen Médico, medicinas y hospital cerca de su casa, disponibles los 365 días del año y las 24 horas del día. Ni los que pagan impuestos tienen eso. Les entregan dinero por cada hijo que procrean, porque cumplen 60 años, por que van a la escuela, para comprar la comida, por que tienen diabetes … en pocas palabras, les medio resuelven la vida y para el paciente eso es suficiente. En consulta lo menos importante es que medicamento toman para la diabetes o que la presión alcancen cifras de 180/100 mmHg. Eso no es importante, lo importante es que ya se cumplió con el requisito y eso los hace merecedores a la entrega de su dinero. El pecado es evidente: un sistema de salud que explota a los Médicos y que busca cumplir con convenios internacionales (principalmente con los de la OMS) a costa de todo. De poco sirve tener cobertura universal o tener registrados a todo los pacientes con enfermedades crónico-degenerativas, si no se les da la atención adecuada, si los controlados alcanzan menos del 20%, si la prevalencia y la incidencia de las enfermedades no diminuye y si la esperanza de vida no aumenta. Si el propio paciente no entiende su enfermedad y no trabaja para corregir su situación, nada cambiará esa deleznable realidad.
  • 8. DESPRESTIGIO DE LA PROFESIÓN.- Este pecado, mas que de la Medicina es de los Médicos y es un pecado gravísimo que cobra una penitencia sumamente dolorosa. Cuando cualquiera puede pretender ser Médico y el estado forma servidores públicos en lugar de científicos humanistas, la esencia que define desde las épocas hipocráticas al quehacer médico, se desvanece. El gobierno, los pacientes, los seguros, las farmacéuticas, los abogados y las demandas terminaron por cosificarnos. Nos perciben como servidores públicos aunque eso es mucho decir, en realidad nos ven como burócratas, como empleados del gobierno, que tenemos obligación de cumplir con todo lo que se nos exija, al final los impuestos pagan nuestro sueldo (de $4 pesos por paciente). Si eso no nos basta, nosotros por vocación, así lo escogimos. La vocación, lo justifica todo: No dormir, no comer, trabajar turnos de 36 horas, ver cinco pacientes por hora, miles de hojas de papeleo, etc. Nadie nos obligo a ser Médicos.
  • Es evidente que la profesión médica en Mexico, esta sumamente desgastada. ¿Cómo no iba a estarlo si nosotros así lo hemos permitido? Nuestro pecado esta en NO tener un profundo entendimiento de lo que implica establecer una adecuada relación Médico-Paciente. No es una relación de iguales, es una confianza que deposita quien busca ayuda, y una conciencia que se sabe receptora de esa confianza y poseedora de las herramientas para ayudar. Quien entiende esto plenamente, entiende a la profesión médica. Sabe que somos mucho más que solo servidores públicos, nuestra responsabilidad va mucho más allá que eso; sabe que el impacto que nuestras acciones tienen sobre la vida del paciente, nos hacen ser mucho más que solo burócratas; sabe que nuestra profesión requiere restructurarse y recuperar el prestigio de los tiempos de antaño. El camino más corto, es la establecimiento de una buena relación con el paciente, en el marco de bases bioéticas sólidas.

Aunque el esfuerzo porque fueran solo siete pecados fue grande, no pude hablar solo de ese número de pecados. De hecho, en algunos pecados existen varios mas. Todos se interrelacionan y son interdepenientes, formando un circulo vicioso que al rodar, termina casi todas las eperanzansas de poder cambiar las cosas. Pero debemos recordar que la esperanza muere al último. Como Médicos debemos tener mucho mayor participación en la vida social y política. Por eso, a pesar de que odiemos la epidemiología y la salud pública, debemos entender sus beneficios y trabajar por desarrollarla.


En fin, pecados existen muchos más, pero en esta revisión creo que se tocan los puntos más algidos de la problemática de salud en México. Problemas, que si conocemos y analizamos por un momento, podemos ayudar a cambiar.

3 comentarios:

  1. En reconocimiento a la labor médica, política y filantrópica del Dr. Manuel Velasco Suárez, fundador de la Universidad Autónoma de Chiapas, los trabajadores de la UNACH queremos ponerle el nombre de tan prestigiado neurocirujano a nuestra colonia. De esta forma se llamaría Colonia Universitaria "Dr. Manuel Velasco Suárez". Tuxtla Gtz, Chiapas. 17 de abril de 2012. Atte. Mujeres de Chiapas A.C.

    ResponderEliminar
  2. Qué tal!
    soy estudiante de medicina y me gustaria saber donde puedo investigar sobre cuales son las mejores plazas para realizar la residencia de geriatria en jalisco, además, cómo publicar casos clínicos, siempre me ha gustado dedicarme a investigar y profundizar sobre los casos, sin embargo a veces es una pérdida de tiempo por que no existen recursos que tomen en cuenta el interés.
    otra cosa es saber si es mejor realizar una especialidad o directamente una maestria, ya que desconozco si hay plazas para laborar, me encantaria realizar una maestria pero estoy llena de rumores acerca del desempleo de medicos que se dedican a la investigación. en lo particular aspiro a una especialidad, pero la maestria y el doctorado es algo que siempre he deseado, sim embargo si no hay campo para ejercer, si no hay plazas particularmente en jalisco por lo pronto...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, solo enfocaré mi respuesta a una de tus preguntas. Si en realidad tienes vocación por la investigación lo que necesitas es nutrirte de conocimiento útil para poder llevar a cabo investigación productiva. Hay dos grandes ramas: la investigación básica y la clínica. Al contrario de los rumores, un mèdico clínico con formación de investigador esta en una ventaja franca al competir con sus colegas. No solamente es capaz de entender e interpretar mejor la literatura y aplicarla a su práctica clínica diaria; sino que esta entrenado para transmitir el conocimiento a través de publicaciones. Económicamente, a la industria farmaceútica le es muy atractivo participar con mèdicos capaces de diseñar y llevar a cabo protocolos de investigación clínica. La retribución económica es muy atractiva para el médico-investigador.
      Suerte en tu carrera. AC.

      Eliminar